Desde nuestro atelier hemos tenido la oportunidad de trabajar en diversas localizaciones, pero nunca vimos venir que acabaríamos comunicando en uno de los paraderos más mágicos de nuestro archipiélago: el Auditorio Jameos del Agua. Este lugar, tan increíble y asombroso a partes iguales, cobró más vida que nunca el pasado fin de semana en una noche protagonizada por el brillo de la excelencia canaria. Una velada en la que tuvimos el placer de poner nuestro granito de arena para hacer posible la primera edición de los Premios Abora. Una entrega presentada por la vicepresidenta ejecutiva de Faconauto Canarias, Yara de León, y dirigida por el lanzaroteño Daniel Curbelo.
Supimos del sueño de Ana Quintana, creadora de los premios junto con Carolina Liébana, en un sofá amarillo el 22 de marzo. Un detalle que, lejos de ser trivial, parecía predestinarnos para la misión y para el trabajo tan inspirador que nos sería encomendado por nuestras islas. Un mes y medio después, tras materializar la esencia de los premios en entrevistas, convocatorias y notas de prensa, lo vimos hacerse realidad en un espacio en el que aún se podía sentir al gran César Manrique, como si él mismo también celebrara, a través de su arte, que por fin había llegado la hora de poner en valor la excelencia y sostenibilidad de nuestra tierra.
Siempre supimos que Canarias no merecía ser reducida a sol y playas, que la imagen de nuestro archipiélago no podía limitarse a la de ser un destino turístico, y el universo de la comunicación nos regaló la ocasión para demostrarlo. Gracias a la iniciativa sostenible Azul Zero, pudimos ser partícipes de enseñar al mundo, por una noche, que nuestras islas son una fuente de talento, que somos un centro vanguardista y empresarial, y que hay personas residentes o arraigadas aquí que trabajan y se esfuerzan cada día por contribuir a la consecución de una sociedad mejor.
Para ello, contamos con la ayuda de dos figuras protagonistas que nos inspiraron y guiaron a lo largo de la gala. Abora fue representada por un holograma y se convirtió en la guía de Terra, interpretada por la joven actriz, Laura Barrera. Ella fue la encargada de encontrar a los 13 guardianes del planeta, a aquellos nacidos o arraigados en Canarias que recibirían un reconocimiento por su compromiso con la excelencia y la sostenibilidad. Entre las gemas que fueron premiadas por sus grandes logros, destacaron: José Valle, Premio Desarrollo Sostenible; Sandra García, Premio Contribución a la Salud y al Bienestar; Javier Santaolalla, Premio Divulgación Científica; Jesús Martín, Premio Educación e Investigación; Raúl Sánchez, Premio Humanidades; Nancy Fabiola Herrera, Premio Arte; Daniel Montesdeoca, Premio Patrimonio; Ariadne Artiles, Premio Influencia; Rafa Méndez, Premio Acento; Carla Delgado, Premio Derechos Humanos; Herminia Fajardo, Premio Mujer en Acción; Grupo Cabrera Medina, Premio Excelencia Empresarial; y José Antonio Martínez, Premio Honor.
Sin embargo, el talento no sólo se materializó en forma de 13 estatuillas originales, sino que también se hizo presente por medio de las actuaciones musicales de grandes artistas como Nia, Blas Cantó y Althay Páez. Sus impecables interpretaciones vibraron y retumbaron en las paredes de los Jameos del Agua, compenetrándose ambas artes y fundiéndose en uno por un sueño: crear la atmósfera perfecta para celebrar una noche inolvidable. Y así fue. Desde el pasado sábado, 11 de mayo, Canarias alza la voz para identificarse como un modelo sostenible, para proyectar un espíritu innovador y para situarse en el centro del mapa.